El fallo informático de Microsoft ha causado un caos aéreo a escala global en plena temporada alta y ha afectado a infraestructuras críticas como hospitales, transportes públicos, empresas o bancos alrededor del mundo. Más de 39.000 vuelos se han retrasado y más de 4.400 se han cancelado en el mundo este viernes a medianoche, según FlightAware, una plataforma tecnológica que proporciona datos y seguimiento de vuelos en tiempo real. En España, los aeropuertos han empezado a recuperar la normalidad pasadas las dos de la tarde tras horas de retrasos y colas. La caída de los sistemas de Aena ha provocado 400 cancelaciones y retrasos en muchos de los 3.520 vuelos operados hasta las 19.00 horas. Ha habido incidencias en las estaciones de servicios y el fallo ha complicado también las primeras horas de la mañana en hospitales públicos de al menos siete comunidades —Aragón, Galicia, Cataluña, Castilla-La Mancha, La Rioja, Castilla y León y el País Vasco— y algunos privados. Los centros sanitarios han sufrido retrasos en las actuaciones programadas, pero se ha mantenido la asistencia. El problema deriva de la actualización de un programa de ciberseguridad de Crowdstrike, que descarta que se deba a un ciberataque. El fallo ha provocado que el sistema operativo Windows, el más usado del mundo, no funcione correctamente.